Un sentimiento normal que experimentamos todos los seres vivos, éste se hace grande cuando estamos fuera de nuestra área de confort y como emprendedores tendremos que lidiar con él muy a menudo.
Emprender es una aventura que nos lleva por una montaña rusa de sentimientos, la parte más alta es cuando estamos ingresando en caja y los clientes no paran de llegar, pero que nos dejará un vacío en el estómago cuando vamos en plena caída y dudamos del paso que hemos dado al emprender.
Emprender es una aventura que nos lleva por una montaña rusa de sentimientos, la parte más alta es cuando estamos ingresando en caja y los clientes no paran de llegar, pero que nos dejará un vacío en el estómago cuando vamos en plena caída y dudamos del paso que hemos dado al emprender.
Es importante comprender que el miedo será un sentimiento normal y que debemos dominarle, respirar profundo es esencial para evitar caer en pánico y tomar decisiones erróneas.
Cuando estemos en esos días en los que ya no vemos tan claro nuestro modelo de negocio y dudamos de la decisión que hemos tomado, debemos respirar profundo, dar una vuelta fuera del área de trabajo y recordar los buenos momentos que nos ha dejado nuestra aventura y por sobré todo refugiarnos en aquellas personas que nos apoyan. Esto nos permitirá levantar una barrera entre el miedo y nosotros, que nos ayude a pensar y reflexionar sobre lo que pueda estar fallando o no, en nuestra joven empresa.
Recordar que no todos lo días serán buenos y que quizás tengamos los muy temidos días de "clientes ausentes" o aquellos días en lo que simplemente todo sale mal.
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