viernes, 4 de abril de 2014

Cuando llega la ola no se puede detener:

No la veo venir, pero sin darme cuenta está aquí, las cosas buenas y malas llegan y tendremos que enfrentarlas como buenos aventureros.

Cuando iniciamos el camino del emprendimiento, jóvenes e inocentes poco sabemos lo que está por llegar, aún cuando dedicamos horas y horas realizando estudios de mercado y sacando proyecciones, la realidad es otra muy apartada de lo que en el papel colocamos, el cambio es constante y como las olas del mar siempre llegan de diferentes tamaños y fuerza.

Debemos estar siempre atentos para evitar caernos y si flaqueamos no debemos nunca dudar y levantarnos nuevamente, para ello la confianza en nosotros mismos será crucial, nunca dudes de ti, ni en lo que crees.

Ser emprender va de esto, de ganar pequeñas batallas diarias, conocer nuestro objetivo y sembrar para recoger al largo plazo el fruto.

El emprendimiento es una forma de vida que aunque quisiera que fuera para todo el mundo, no lo es. 

Se debe tener una condición especial que aunque todos la tenemos muy pocos la aprovechan. 

Por tanto si estás dentro vamos a saltar olas y seguir adelante porque no estas solo y juntos lograremos el éxito que tanto merecemos. 

Adelante...

Foto de http://es.123rf.com/

2 comentarios:

  1. Cierto, el emprendimiento es una forma de vida. Relaciono el proceso del emprendimiento con un carrusel que a veces sube y a veces baja en lo que respecta al ánimo, dinero, oportunidades, persistencia... Estoy de acuerdo que no hay que flaquear y considero importante mantener ese carrusel bajo control.

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  2. Gracias, Carlos por tu comentario tan acertado. Totalmente de acuerdo mantener el control es la clave.

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